jueves, 25 de agosto de 2011

Incertidumbre


Después de lo del viernes, después de estar contigo estos días, de olerte el pelo recién salida de la ducha, de recibir tus besos, que ya sabes que me vuelven loco, sólo de pensar en que quizás (un quizás muy quizás, lo sé) esta noche podamos estar juntos, despedirnos antes de mi viaje a Madrid, me pongo taquicárdico.

Ayer te dije que quería hacértelo suave, dulce, como el tercero del viernes. Y no es que no me gusten los otros, sabes que adoro tenerte como una perra en celo, suplicando que te folle fuerte. Pero tengo ganas de sentir otra vez esa dulzura, esa forma de amarnos, más lento.

Tenerte abrazada a mi mientras te penetraba de esa manera, sintiendo cómo la piel de mi polla rozaba cada centímetro de ti hasta sentir tu final. Apretar entonces un poco más, sintiendo tus gemidos en mi boca, fue delicioso. Quiero volver a probarlo.

Y bueno, si esta noche no puede ser..., se me ocurre algo. Mañana me llevas tú al aeropuerto, y si vamos con suficiente antelación, ¿por qué no hacer uso de esos baños tan grandes? ;-)

Sí, ya lo sé. Tenemos ganas de lo otro, pero puede ser tan excitante... Da igual. He despertado con la incertidumbre de no saber si esta noche tendré tu cuerpo para mi, si podré compartir contigo el placer que nos damos. Va a ser una despedida sosa, y cada vez se me hace más difícil no poder vivir contigo, y disfrutar de ti cada minuto, cuando llega la noche, y nuestras sábanas tendidas ya esté dormida, para entregarnos el uno al otro y disfrutar del juego entre nosotros.

Ojalá esta noche podamos. Ya estoy soñando con ello.

Te quiero amor.

lunes, 22 de agosto de 2011

La noche que me fundí contigo


Lo que ocurrió el viernes..., no tengo palabras para describirlo. Una orgía de sexo entre nosotros dos, no se me ocurre otra forma de decirlo. Fueron tres polvos mágicos, cada uno en su línea, con su forma, y contigo, que es como mejor se está, contigo.

El primero llevaba la urgencia de la falta que me haces, de esa semana que llevábamos tocándonos, sintiéndonos, regalándonos besos, algunos dulces, otros blasfemos, y todos hermosos, como sólo nosotros sabemos dárnoslos. Nos entregamos en el coche como solemos hacer, yo dándolo todo, tú dando mucho más de lo que tienes, y disfrutando de ello sin medida, casi sin límites.

Después el cine, en el que me quedé dormido con la promesa del siguiente, pero pensando que quizás volvería a ser una de esas veces en las que no pasamos del primero. Otro "mi gozo en un pozo", pero no. Me despertaste, supiste elevarme otra vez al sitio donde siempre quiero estar, me devolviste al sueño. Y de nuevo volvimos a follar como los obsesos que somos. Tu piel, tu boca, tus tetas, tu coño..., todo fue mio de nuevo. Te arranqué todos aquellos gemidos de placer que son música para mis oídos, y te dejaste regalar con mi lengua y mis dedos en lo más profundo de ti. Mi polla no sabía dónde meterse con aquella fabulosa mamada que me hiciste. Bueno, sí que lo sabía, y de hecho se hundió en ti, varias veces, volviéndonos locos de placer.


viernes, 19 de agosto de 2011

Cosas que NOS quiero hacer


Después de comer he seguido tu consejo y me he metido en el baño. Me he hecho una grandísima paja, estupenda, abundante. Como siempre, pensando en ti, que es lo que me más me gusta, como más me gusta. Y he pensado en cosas que nunca hacemos, pero que me gustaría hacerte, y que me gustaría que me hicieras. Quizás quedarán tan solo en fantasías y ya está, o quizás nos animamos y le demos vida a alguna de ellas.

De las que me gustaría hacerte hay una de ellas que tengo en mente desde hace tiempo: hacerte una comida de coño que te haga reventar de puro gusto. Sólo eso. Calentarte lo suficiente para que se te hinche como se te suele hinchar, abrirte bien el coño con mis dedos, tú bien abierta de piernas para mi, y empezar a lamértelo todo con la lengua. Morderte los labios, el clítoris, chupártelo, atraparlo con la boca, follarte con la lengua, rebañarte el coño entero con la lengua.


Sólo un poco de esta noche

Esta noche vas a conocer el significado de lo que significa "ser mía", porque lo eres hasta que quieras dejar de serlo, pero de momento, si no me equivoco, lo eres. Y eso significa muchas cosas. Por ejemplo, que voy a hacerte lo que yo quiera, y tú no me lo vas a impedir. Hoy vas a decirme que sí a todo, y aún me vas a pedir más.

Esta noche te vendaré los ojos, como otras veces, y te ataré, pero dándome la espalda, porque quiero que sientas mi lengua por cada trozo de piel por la que voy a pasearla, por tu espalda, mientras te agarro las tetas con fuerza, por tu cuello mientras mis dedos te acarician y abren el coño, por tus nalgas, antes de azotártelas...

No pienso parar ahí. Quiero tenerte así porque mi lengua jugará entre tus muslos, y antes de empezar a comerte el coño, como nos gusta a los dos (te prometo la mejor comida de coño que te hayan hecho nunca, no comparable con ninguna otra), antes de eso, mi lengua excitará tu culo. Sí, lo quiero muy muy excitado, porque hoy voy a jugar con él. Hoy voy a hacerte algo nuevo, algo que sé que te va a encantar.


jueves, 18 de agosto de 2011

Azotarte...


Jamás te pegaré, pero últimamente fantaseo mucho con azotarte, mientras te penetro desde atrás, en el coño o en el culo. Pero no esos azotes que a veces te doy con la mano, y que tanto nos ponen a los dos, sino los azotes con una fusta, una de esas de cuero. Creo que ver cómo se enrojecen tus nalgas, mientras te follo, va a ser algo inolvidable.

Sé que tú también lo deseas, y mientras anoche me quedaba dormido pensando en ello, sabía sin lugar a dudas que tengo que comprar una; o bien directamente, o bien con el juego aquel que vimos en el sexshop. Y claro, como muchas veces me ocurre, soñé con lo último en lo que estaba pensando antes de dormirme.

Por un momento había pensado en relatar todo el sueño, pero a veces me fastidia sentir que es mi imaginación la que rellena los huecos que le faltan al sueño, y mis dedos calenturientos los que rellenan los huecos que le faltan al relato. Así que, directamente, te relataré la escena con la que me he despertado. Te resultará familiar, porque ayer mismo hablábamos sobre el tema.

Era una habitación diáfana. Tú estabas atada a una cadena del techo, casi de puntillas, con las piernas abiertas, y los ojos vendados. Estabas a la altura justa para poderte follar así, y eso hacía. Y mientras te follaba, mis manos apretaban tus tetas con fuerza, y pellizcaban tus pezones. Tú gemías como una puta en celo, pidiéndome que te follara más fuerte.

Me puse delante tuya, y aprovechando que estabas colgada del techo por las muñecas, te posicionaba las piernas alrededor de mi cintura y vovía a follarte, con más fuerza aún, mientras mis manos acariciaban y apretaban tus nalgas, y uno de mis dedos empezaba a penetrar tu culo, con la intención de dilatarte un poco.


martes, 16 de agosto de 2011

¿Pantalón?¿Leguins? O..., ¿falda/vestido?


No sabría decirte, así que voy a analizar cada prenda, y las fantasías que tengo mientras duras con ellas puestas.

El pantalón te sienta bien, sobretodo cuando son ajustados. De hecho, sospecho que el día que te dé por ponerte pantalones de tela, no vaqueros, tampoco te van a sentar nada mal. Me encanta vértelos puestos, pero no llego a tu piel con ellos, y a decir verdad, cuando follamos, es de las primeras prendas que quiero quitarte.

Los leguins (o esa especie de pantalón elástico ajustado, de los que tienes uno negro que me encanta verte puesto), me gustan mucho. Te hacen un culo mmm..., qué decirte que no sepas, ¿eh cariño? Muchas veces fantaseo con que es lo único que llevas puesto, y puedo ver tu culo moverse, desde arriba, mientras me haces una de esas fabulosas mamadas tuyas. Sólo de imaginármelo ya estoy sufriendo una erección.

Y los vestidos y faldas que traes a veces, ufff, sabes que me gustan tus piernas. El tacto de tus muslos me vuelve loco, cuando vamos en el coche y puedo ir acariciándote. Me encanta fantasear con que te follo sin quitarte la falda, como el otro día, cuando llevabas esa con tela vaquera que te quieres alargar. Sólo de pensar que te tenía cabalgando encima de mi, con ella puesta, mientras apretaba tus tetas con mi boca...


Related Posts with Thumbnails